La soledad o los otros son normales si son como yo. Lourdes de la Rosa

Si más compañeros y compañeras nos pusiéramos a escribir sobre lo que pensamos hacemos y sentimos como profesionales, ¡Cuánto aprenderíamos y cuánto aumentaríamos nuestra autoestima como colectivo!.  JA lo mejor así dejábamos de hacer cursillos de formación ajenos a nuestros intereses, anodinos y desmotivantes y empezábamos a sentimos cada vez más capaces de participar y dirigir nuestra propia formación  y  actividad profesional!. ¡Cuánto nos ayudaríamos!
Hay una frase que usamos en muchas ocasiones para excluir, para situarnos por encima de otras personas: son buenos si son como nosotros y malos o peores si no lo son. Quizás, si en vez de para excluir, la  usáramos para acercarnos a lo que de común y «aprovechable» tenemos cualquier docente, quizás nos sentiríamos mejor,  aprenderíamos más unos de otros. Podríamos decir: «Sí, TAMBIÉN aquellas personas son normales… Como nosotras o nosotros». No suena mal, ¿verdad?
«Sentirnos bien con nosotros mismos es un derecho que tenemos todos los seres humanos por ser personas. Es nuestra responsabilidad conseguir que este derecho se haga realidad en nuestras vidas: en nuestras  relaciones intrapersonales, Interpersonales y con nuestro entorno»