Sobre la propuesta de organización, realizada por Madrid, de cara al próximo Congreso y propuestas de debate a medida que se va acercando el mismo.
El día 8 de enero nos reunimos a través de la cuenta de Zoom que el MCEP tiene contratada Mariquina, Juan, Enrique, Diana, Ángeles y Abel (en orden alfabéticamnete inverso para no ponerme a mí el primero, que quedaría un poco feo) y luego se nos unió también Gabina desde México.
Como ya todo el mundo conocía de la convocatoria del encuentro de Talleres para febrero a través de otros Talleres y/o MCEPs, y puesto que el nuestro no iba a realizar reunión como tal en el mismo, tan sólo se mencionó como información.
Pasamos después a comentar la propuesta organizativa por parte del MCEP de Madrid, como grupo organizador del próximo congreso.
Resultó un debate intenso y muy animado sobre la existencia de algunos talleres (incluido el de TE), hasta tal punto que hubo ocasiones en las que las seis personas presentes teníamos la mano levantada pidiendo la palabra.
Hablamos de lo que debe entenderse como Taller del MCEP, de la manera en que puede hacerse extensible al resto de miembros del MCEP los debates de cada Taller, sobre todo lo que se refiere a fundamentos pedagógicos y sociales, de la aparición o desaparición de Talleres o de otros eventos que se repiten aunque hubieran nacido en un momento o situación concreta…
En principio, coincidíamos en que la propuesta del llamado Espacio Freinet serviría para sumar y no para quitar, como algo necesario dentro de nuestros congresos, en el cual se podría incluir los aspectos a debatir sobre la filosofía del MCEP, aunque, al tiempo, nos surgían bastantes dudas sobre su puesta en funcionamiento y su posible éxito.
A continuación las personas que este momento se encuentran en activo pasaron a contarnos su situación en el aula y su trabajo actual
Mariquina está trabajando en ocasiones de forma semipresencial, exponiendo el gran desbarajuste que ello supone, atendiendo a la vez a quienes están en el aula y a quienes están en sus casas, con los correspondientes problemas de conexiones y comunicación. Su trabajo sigue en la línea de la experiencia que nos contó en el Congreso de este año, si bien tiene entre manos la perspectiva de un inicio de uso de realidad virtual.
Mª Ángeles tiene clase presencial, utilizando Google Classroom, que puede resultar muy organizativo, pero con mucha disparidad en el interés del alumnado. También maneja Genially, que, si bien no es cooperativo, intenta adaptarlo al trabajo en equipo.
Diana también tiene clase presencial, pero si en algún grupo ha hecho falta la enseñanza semipresencial ha funcionado bastante mal, pues cada profesor/a ha ido a su aire sin colaboración entre la gente. A través de la asignatura de Educación para la Ciudadanía tiene el proyecto de realizar un taller de fotografía y vídeo en colaboración con la asociación vecinal.
Gabina expone la gran dificultad que supone en el trabajo en línea con un aula de Infantil, principalmente resaltando la falta de poder interactuar, así que optaron por asistir a las aulas. “La tecnología debe ser un auxilio a las necesidades, nunca una solución a los problemas”.
Como propuesta de trabajo del Taller se propone ir sugiriendo posibles temas de debate en torno a las Tecnologías y van surgiendo algunas inquietudes:
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¿La tecnología disminuye el contacto interpersonal? ¿Enriquece o quita vida?
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La gamificación en la educación.
Así mismo toda aquella persona que encuentre algún artículo o documento que pueda resultar interesante para el Taller puede remitírmelo a mí para su posterior difusión entre todo el personal a través de la lista de correo.
La próxima reunión queda prevista para febrero, en torno al sábado 19, sin marcar una fecha fija, pues dependerá de cuándo se celebre el encuentro de Talleres.
Y así dimos por finalizada la reunión con besos y abrazos virtuales, siempre a la espera de los que podamos darnos en Alcalá.